ARCHIVOCES DE LA OFI. Desde Maldonado/ENTREVISTA/Eduardo Mérica para Diario Uruguay.
Hoy Juan Angel Miraglia, apenas se ve o apenas se deja ver: está cubierto del periodismo que hay que hacer y que no se hace. Siendo duro, drástico y polémico, facetas que cosechó con su ocupante labor en prensa, radio y televisión, a lo largo de sus más de 90 años de edad; de entrega total, absoluta, sin desfallecimientos, a su gran pasión: narrar los hechos del deporte -especialmente lo del fútbol-, con máquina de escribir en mano o muchas veces por radio y por televisión. Hijo de familia de la zona este, era nieto del zapatero y “dentista” de Maldonado, y así tuvo una dilatada trayectoria como periodista deportivo, que concluyó como redactor de la contratapa del diario Últimas Noticias.
«El periodismo deportivo durante muchos años, lo ha ignorado y lo ha olvidado, es la palabra exacta. Ha olvidado, que puede ser un referente de primera línea, que puede ser un hombre que está intacto en sus conceptos…»
Ariel Giorgi, periodista
Estuvo radicado en Maldonado por más de veinte años, en un edificio frente por frente al Ta Ta supermercado, y hacia allí fuimos a visitarlo para rescatar una catarata de recuerdos y sensaciones, y lo encontramos apasionado y vital, pudiendo conformar el archivo de su existencia. Ahora es parte de todo lo que Miraglia fue, a partir de su niñez y de un hombre obligado a luchar para ganarse el pan, hasta llegar a ser el más grande periodista deportivo de Uruguay, que mereció cualquier cantidad de premios que no posee y que se hizo famoso a fuerza de tenacidad, empuje y transpiración. Todo lo que nos cuenta en esta charla, lo dice sencillamente sin dramatismo. Porque lo siente así y así quería decirlo…
«Es una persona que la disfrutó la profesión, la trabajó, la enfrentó, la estudió… Es decir: pasó por todos los avatares. Él no solamente hizo de periodista deportivo, FUE UN PERIODISTA DEPORTIVO EN TODO EL SENTIDO DE LA PALABRA»
Ariel Giorgi, periodista
Se lo preguntamos a Ariel Giorgi, el dos veces presidente del Círculo de Periodistas Deportivos del Uruguay
¿Quién es Juan Ángel Miraglia?
«En realidad hablar de don Juan Ángel Miraglia, de una trayectoria impecable, de un conocimiento periodístico de los viejos profesores que tuvimos por suerte dando cátedra cuando estaban trabajando, es un orgullo. Pero también es un orgullo poderlo contar entre nosotros, porque Juan Ángel Miraglia, con sus más de 90 años, supo ser un periodista de fuste, de primera línea y un hombre que no se guardaba nada. Un hombre que enfrentaba los hechos, un hombre que decía las cosas por su nombre y que tuvo a su vez como toda persona que tiene esas características serios enfrentamientos y serias discusiones, pero tuvo también, la satisfacción de ser Jefe de página del matutino El País, cuando en realidad los diarios eran los órganos y los voceros principales del periodismo. La televisión no existía y las radios cumplían una parte, pero el diario era fundamental. Y en El País fue un hombre que cumplió una trayectoria sensacional e impecable. Además después fue fundador del diario Últimas Noticias, y por sus principios; fue un hombre que sus principios los anteponía completamente a cualquier beneficio económico o beneficio de lucimiento personal o de la propia manera de encarar su trabajo. Dejó el cargo de Últimas Noticias cuando no estaba de acuerdo con quien compartía la función allí como Sub Jefe, Atilio Garrido. Don Juan Ángel Miraglia, se retiró, en ese momento…
Y yo creo que el periodismo deportivo durante muchos años, lo ha ignorado y lo ha olvidado, es la palabra exacta. Ha olvidado, que puede ser un referente de primera línea, que puede ser un hombre que está intacto en sus conceptos, pero a su vez tiene vivencias que se han ido yendo con las personalidades que han desaparecido de este mundo.
Es decir: Lo longevo de su vida nos permite tenerlo como un libro abierto, como alguien que nos puede ilustrar, a los que ya tenemos -incluso- algunos años, poder llegar a lo que fue el fútbol uruguayo. Y así clarito sin dobleces y sin situaciones en las cuales acomodaba algo en su comentario para salir del paso… Un hombre que si tenía que enfrentar completamente a alguien, dirigente, jugador e instituciones; él, por supuesto que medía las consecuencias que iba a traer, pero él no se callaba; él iba con su convicción, iba con su manera de encarar que fue nítida siempre a través del tiempo. Por lo tanto creo que para don Juan Ángel Miraglia, es un homenaje en realidad, poder tener su palabra, hoy en día, donde tantos lo han olvidado y lo han dejado tan postergado… Cómo somos los seres humanos. Lamentablemente nos acordamos cuando pasa algo muy grave o que no lo tenemos junto a nosotros y entonces sí, sacamos a relucir todas las condiciones de las personas, hablamos de todos los puntos que tiene cada uno… Por lo tanto creo que es una buena oportunidad para dialogar y para poder estar en contacto con alguien, que es una persona que la disfrutó la profesión, la trabajó, la enfrentó, la estudió… Es decir: pasó por todos los avatares. Él no solamente hizo de periodista deportivo, FUE UN PERIODISTA DEPORTIVO EN TODO EL SENTIDO DE LA PALABRA»
-¿Qué recuerda de sus obras periodísticas deportivas?
-Me acuerdo, sí. Me acuerdo de TODO FUTBOL y de la Revista de los DEPORTES, en la que escribió Antonio Pippo. De esa época, yo qué sé… hicimos varias cosas en varios momentos. Bueno, en fin…
-Hablemos de sus comienzos en el periodismo deportivo de Uruguay.
-Allá por el año ´43, empecé a hacer partidos de Intermedia, cuando existía la Divisional Intermedia en la Asociación Uruguaya de Fútbol. Y empecé a hacer partidos para El Diario y La Mañana, los domingos, incluso, los domingos de mañana en Tercera División. Hice básquetbol con Héctor López Reboledo, que era el Jefe de básquetbol en el diario de la tarde. Aunque yo no tenía mayor conocimiento ni dominio del básquetbol hasta ese momento, en fin, empecé a hacer crónicas y a llevar la información, a trasmitirlas o escribirlas durante un par de años. Y en el ´45, en noviembre de ese año me incorporé como cronista del diario La Mañana, ya en forma estable. Empecé como cronista -en aquel tiempo- ganando cincuenta pesos por mes; que se transformaron en pocos meses después en ochenta, porque en Marzo del ´46, se firmó el primer laudo de salario para los periodistas. Eso es lo que recuerdo, y entonces pasé a ganar de cincuenta a ochenta pesos en término de cinco a seis meses, cosa que para la época era un poco asombroso y sobre todo para mi juventud de entonces…
-¿Dónde nació?
-Yo nací en San Carlos, ciudad que está cercana (Maldonado) donde viví veinte años. Pero me críe en el campo de Garzón, en el departamento de Maldonado hasta los 7 años. Y después hubo necesidad de mis padres de mandarme a la escuela, era el mayor de seis varones, y tenía 7 años; y entonces desde ese momento quedé en Montevideo con una tía hermana de mi madre y ahí ya no me fui más de Montevideo. Hice escuela, liceo y después empecé a trabajar, y bueno… hasta que me vine de Maldonado me radiqué permanentemente en Montevideo donde hice toda mi carrera de periodismo y algunas otras actividades bastante distintas en algunos casos…
-¿Qué día nació?
-El 1 de setiembre de 1922.
-¿Usted nació periodista o se hizo?
-No. Yo no creo en la vocación. Creo en la necesidad de trabajar. Y una, tal vez, una vocación instintiva para lo periodístico porque empecé a aprender periodismo antes de entrar al periodismo. Yo leía los diarios con gran dedicación, cualquier diario que venía caía en mis manos y me interesaba mucho leer a la gente que tenía firma, que publicaba y escribía sobre cosas importantes… Y entonces me empecé a interesar siempre por eso y era un gran lector de literatura muy variada; y además, creo que escribí siempre bien y eso me favoreció en algún aspecto. Y cuando entré al diario ya de lleno fue una cosa imperativa, una dedicación total y absoluta: Yo, por ejemplo, salía de trabajar a las dos o tres de la mañana, llegaba a mi casa en la Unión en Montevideo; a esa hora en lugar de acostarme empezaba a delinear algunas cosas para el día siguiente en materia de diagramación o de ideas para aplicar al periodismo -en este caso- deportivo que era al que estaba dedicado entonces…
En 1968, en oportunidad de su primera edición, la Revista de los Deportes -una publicación que alcanzó gran prestigio por sus colaboradores, encabezados por Juan Ángel Miraglia- realizó un extenso informe sobre la crisis en la que se suponía entonces había caído el fútbol. Fueron consultados dirigentes, entrenadores, futbolistas e hinchas. En algunos casos, fue como leer entrevistas realizadas hoy…