Dos jugadores referentes de la selección uruguaya como el capitán Diego Godín y el goleador Luis Suárez; el presidente de la Asociación Uruguaya de Árbitros de Fútbol, Marcelo De León; y el presidente de la OFI, Gustavo Bares, fueron quienes pidieron la intervención de la AUF ante la Conmebol a través de notas enviadas a la Confederación.
Finalmente las firmas no estuvieron en una sola nota, sino que la misma misiva fue remitida a la Conmebol por cada una de las partes. La de OFI habría tenido un agregado, ya que se informó que no se dejaba votar a la organización que rige los destinos del fútbol del Interior en las elecciones de la Asociación.
La Mutual de Futbolistas Profesionales no firmó el pedido en virtud de que FIFA actuó antes de lo previsto. El gremio que ahora dirige Michael Etulain tenía previsto reunirse para tratar el tema, pero finalmente FIFA adelantó la decisión de intervenir antes de que la Mutual plantara bandera.
Las partes solicitaron la intervención tras dejar en claro que el actual estatuto no contemplaba a todos los actores del fútbol y no era democrático y plural como lo exige FIFA.
Mañana, el presidente en ejercicio de la AUF, Edgar Welker, viajará a Asunción para plantear la molestia de la Asociación al entender que las explicaciones dadas por FIFA no se ajustan a la realidad. Welker iría acompañado por el presidente renunciante, Wilmar Valdez. STB
Este es el borrador de la carta
Sr Alejandro Domínguez Wilson-Smith
Presidente de la Conmebol
CONMEBOL
Autopista Aeropuerto Internacional km 12
Asunción (Paraguay)
Montevideo (Uruguay), 15 de agosto de 2018
Estimados Señores,
Asociación Uruguaya de Fútbol
Ante los últimos acontecimientos que han tenido lugar en el contexto de las elecciones a la presidencia de la Asociación Uruguaya de Fútbol (en adelante, “AUF”), los firmantes de la presente comunicación interesan exponer los siguientes hechos que, por su extrema relevancia y transcendencia, entendemos que es nuestra obligación poner en su conocimiento, para que se adopten las medidas oportunas.
Los vigentes estatutos de la AUF no respetan los principios de democracia y pluralidad, al no incorporar todos los estamentos que integran el fútbol uruguayo, de acuerdo con los Estatutos Modelo FIFA 2005.
Los estatutos de una asociación constituyen su columna vertebral, ya que ordenan la vida del fútbol nacional, confiriéndole las reglas y principios por los que debe regirse. Es esencial que dicho cuerpo normativo incorpore los principios de transparencia, democracia y pluralidad que reflejan los valores que el deporte el fútbol quiere transmitir.
Precisamente por ello, desde el año 2001 FIFA redactó unos estatutos modelo, que fueron modificados posteriormente en el año 2005, incorporando las mejoras recogidas en los nuevos Estatutos FIFA de 2004, y decidió aplicar una política de modernización de los estatutos de sus miembros, con la finalidad de mejorar las instituciones que están llamadas a gobernar el fútbol en cada país, y fortalecer también los principios contenidos en los Estatutos FIFA.
Los Estatutos Modelo, en consecuencia, contienen todas las disposiciones que deben figurar en cualquier texto constitutivo digno de su nombre, que rija cualquier asociación nacional afiliada a FIFA. Por ello, cualquier asociación debe asegurarse de que sus estatutos cumplen fielmente, y de forma razonable, con las disposiciones de los Estatutos de la FIFA.
Dentro de los Estatutos Modelo se regula en el capítulo II los miembros que deben integrar las asociaciones nacionales, definiendo que “las ligas, las asociaciones regionales, otros grupos relacionados con el fútbol e individuos puedan ser miembros de la asociación”, y estableciendo el principio de igualdad sobre el fundamento de que “una asociación puede establecer varias categorías de miembros, pero es importante que cada miembro de la misma categoría tenga los mismos derechos y obligaciones”.
Especialmente significativo es el redactado del artículo 10 de los Estatutos Modelo, según el cual:
“Artículo 10.- Admisión.
Los miembros de X son:
a) los clubes;
b) las asociaciones regionales;
c) las ligas;
d) las agrupaciones de jugadores;
e) las agrupaciones de árbitros;
f) las agrupaciones de entrenadores;
g) …[a determinar por la asociación].”
Es palmaria, por tanto, la obligación de reconocer en los Estatutos de la asociación la condición de miembro a los distintos estamentos que configuran el mundo del fútbol, especialmente clubes, jugadores entrenadores y árbitros.
A pesar de ello, y a causa de los distintos intereses ajenos, y de la injerencia injustificada de terceros, la AUF ha mantenido su anquilosada y obsoleta regulación estatutaria, infringiendo el mandato de la FIFA y negándose a incorporar a jugadores, entrenadores y árbitros como miembros de pleno derecho en el seno de su Asamblea. La AUF, de forma expresa, solo reconoce como miembros a las Ligas (es decir, los clubes). Así lo establece de forma expresa en su artículo 7º de los vigentes estatutos de la AUF:
“Artículo 7º. Ligas y clubes. La AUF estará integrada por la Liga Profesional de Primera División, la Liga Profesional de Segunda División, las ligas y clubes del interior del país de carácter amateur, afiliados a la AUF por intermedio de la OFI, la Liga Metropolitana Amateur, la Liga Nacional Amateur, las distintas ligas de todo el país y todos los clubes que integren cada una de las mismas a través de sus divisiones y organizaciones.”
Además, el artículo 16º de sus estatutos determina la composición de la Asamblea General, según el cual:
“Artículo 16º. Composición. La Asamblea General estará compuesta por:
a) los clubes de la Liga Profesional de Primera División, representados por su presidente o
delegados alternos, contando con un voto cada uno de ellos;
b) la representación de la Liga Profesional de Segunda División, designada por sus clubes y
con un voto;
c) la representación de OFI, designada por su Consejo Ejecutivo, con un voto, salvo cuando
se traten temas de exclusiva incumbencia de las Ligas Profesionales (Primera y Segunda Divisiones);
d) la representación de la Liga Metropolitana Amateur, designada por sus clubes, con un voto, salvo cuando se traten temas de exclusiva incumbencia de las Ligas Profesionales (Primera y Segunda Divisiones);
e) las Mesas Ejecutivas con voz pero sin voto en todos aquellos temas en que tengan interés
directo.
Será presidida por el Presidente de la AUF, actuando en la Mesa todos los miembros del
Consejo Ejecutivo, quienes tendrán voz pero no voto.(…)”.
La ausencia de representatividad del resto de estamentos en el seno de la Asamblea de la AUF, donde única y exclusivamente tienen en la actualidad representación los clubes, desnaturaliza de forma radical sus funciones y objetivos, y la convierten en una suerte de asamblea patronal, donde el resto de actores deben contemplar y acatar su voluntad sin tener derecho a ser escuchados ni participar en el proceso de toma de decisiones. No se aplican, por tanto, los principios de transparencia, democracia y pluralidad, que FIFA exige incorporar en todos los estatutos de las asociaciones.
Así mismo, y tal como se ha demostrado a lo largo de los últimos veinte años en la vida de la AUF, dicha composición en la asamblea, irregular, antidemocrática y no plural, ha llevado a la misma a tomar decisiones sesgadas, viciadas e incluso en ocasiones gravemente perjudiciales contra los propios intereses de la asociación y del mundo del fútbol. Es fácil de comprender. Actualmente, la asamblea está integrada por diecinueve voluntades: los dieciséis clubes de la Primera División, cada uno con un voto; la delegación de la Segunda División Profesional con un voto; la de la Segunda División Amateur con un voto; y una representación de OFI, también con un voto. OFI y la Segunda División Amateur solamente participan cuando se consideran asuntos del fútbol amateur o que le competan directamente a sus ligas.
La precaria situación económica de algunos de los clubes uruguayos les ha hecho ser especialmente vulnerables a las voluntades de terceros, que a cambio de facilitar su subsistencia económica se aseguran incidir en su voluntad decisoria en la asamblea general. Sólo así se explica que en la asamblea celebrada el día 23 de agosto de 2016, nueve (casi la mitad) de los diecinueve miembros votaran en contra de una propuesta que suponía para la asociación pasar de cobrar 1.500.00,00 USD a 26.5000.000 USD. Dicha propuesta se aprobó finalmente por la diferencia de un solo voto, cuando el sentido común indicaba que en cualquier otra circunstancia, sin la influencia de terceros, hubiera sido aprobada por unanimidad. Otros episodios son igualmente remarcables, como por ejemplo, lo acontecido en relación a la comercialización de los derechos de retransmisión de televisión de los partidos de fútbol local o de la selección nacional, etc…
La pluralidad representativa en la asamblea, la democratización de la misma y, en consecuencia, la incorporación de dichos estamentos en los órganos de decisión de la AUF, traerán como consecuencia poder depurar las malas praxis del pasado, blindarse a las presiones externas y, en definitiva, redundará enbeneficio propio, y será por el bien del fútbol.
Solicitud de intervención de la AUF por parte de la CONMEBOL
Ante tal situación, que pone en grave riesgo la estabilidad del fútbol de nuestro país, solicitamos formalmente la intervención de la CONMEBOL y FIFA, con la finalidad de que intervengan la Asociación Uruguaya de Fútbol, y nombren una entidad gestora a los sólos efectos de proceder a reformar definitivamente los estatutos de dicha asociación, recogiendo de forma cabal y razonable los principios que emanan de los Estatutos Modelo FIFA 2005, y una vez aprobados, se proceda a las primeras elecciones verdaderamente democráticas y plurales, donde todos los estamentos del fútbol tengan voz y derecho de voto para elegir a los nuevos dirigentes encargados de dirigir los destinos del fútbol uruguayo.
Esta intervención se hace urgente y del todo necesaria a la vista de lo expuesto anteriormente, estando dispuestos los colectivos firmantes a tomar todas las medidas necesarias, sin descartar ninguna, ni las más graves, a fin y efecto de que se pueda iniciar esta nueva etapa en el fútbol de Uruguay.
Quedamos a su disposición para cualquier ulterior solicitud de información y/o colaboración, y agradeceremos que acusen recibo de la presente comunicación.
Atentamente