Botafogo aplastó a Peñarol en el duelo de ida de las semifinales de la Copa Libertadores. El líder del torneo Brasileirão hizo pesar la localía y su enorme jerarquía futbolística y goleó 5:0 al equipo de Diego Aguirre.
Así Botafogo queda a un paso de la final de la Copa Libertadores. Con un gran segundo tiempo, el Fogao aplastó a Peñarol por 5–0, en la semifinal de ida jugada en Río de Janeiro. Los cariocas son el único club grande de Brasil que todavía no ha ganado la copa.
PASARON A LA HISTORIA… MAS NEGRA DE LOS CARBONEROS
COPA LIBERTADORES DE AMÉRICA
SEMIFINALES
PARTIDO DE IDA
JUEVES 23 DE OCTUBRE
BOTAFOGO (BRASIL) 5:0 PEÑAROL
Cancha: Estadio Olímpico Nilton Santos de Río de Janeiro.
Juez: Andrés Rojas. Asistentes: Alexander Guzmán y Richard Ortiz.
Cuarto árbitro: Bismarks Santiago. VAR: Yadir Acuña, Jhon Perdomo y Jhon León (Jueces de Colombia).
BOTAFOGO: John, Vitinho (81′ Óscar Romero), Bastos, Alexander Barboza, Alex Telles (85′ Fernando Marcal), Fretas, Gregore (74′ Danilo Barbosa), Jefferson Savarino, Luiz Henrique (74′ Tiquinho), Thiago Almada y Jesús Igor (81′ Mateo Ponte). Director técnico: Artur Jorge. Suplentes: Raul, Adryelson, Allan, Matheus Martins, Cuiabano, Tche Tche y Carlos Eduardo.
PEÑAROL: Washington Aguerre, Pedro Milans, Javier Méndez, Guzmán Rodríguez, Maximiliano Olivera, Damián García (57′ Gastón Ramírez), Rodrigo Pérez, Eduardo Darias (57′ Camilo Mayada), Leonardo Fernández, Jaime Báez (69′ Lucas Hernández) y Maximiliano Silveira (69′ Leonardo Sequeira). Director técnico: Diego Aguirre. Suplentes: Guillermo De Amores, Leonardo Coelho, Nahuel Herrera, Ignacio Sosa, Alan Medina, Facundo Batista, Felipe Avenatti y Matheus Babi.
GOL: 51′ Jefferson Savarino (B), 55′ Alexander Barboza (B), 59′ Jefferson Savarino (B), 73′ Luiz Henrique (B), 79′ Igor Jesús (B).
Tarjetas amarillas: 12′ Luiz Henrique (B), 35′ Rodrigo Pérez (P), 35′ Igor Jesús (B), 60′ Gregore (B).
Partido de vuelta: jueves 30, a las 21:30 horas en el Estadio Campeón del Siglo.
Durísima derrota de Peñarol: 0-5. Bancó notable el primer tiempo, pero el gol recibido lo desconcentró, desnudando así sus problemas y potenciando las virtudes de Botafogo, que claramente es el mejor cuadro de Brasil y probablemente de la copa. No supo cortar el aluvión ni enfriar el partido.