Se coronó campeona de la octava edición del Ironman 70.3 de Manta, en Ecuador. Tiene 46 años y tres hijos de 14, 16 y 18. Vive y entrena en Maldonado. «El camino de una deportista amateur es duro, más cuando sos una mamá cualquiera, cerca de los 50, que de repente descubre su pasión», dijo Silvia luego de recibir el premio.
Las Grandes Maratones es una competición internacional de atletismo creada en 2006 que agrupa las seis más importantes maratones anuales del mundo. Silvia ya corrió cuatro. Comenzó por la de Berlín a los 42 años, siguió la de Chicago, luego Boston y por último Nueva York.
Este domingo alcanzó el podio en Ecuador y para diciembre tendrá la competencia más importante hasta el momento: el Mundial de Ironman – nado, ciclismo y carrera a pie – en Nueva Zelanda.
“Era una mamá como cualquiera, había estudiado, soy profesional, tengo hijos, y a esa edad dije que necesitaba tener un desafío nuevo en otra área y me propuse correr una maratón”, contó en una entrevista para Espn.
Luego de estar muchos años en el extranjero, Silvia se radicó en Punta del Este. Desde acá también motiva a otras personas, por ello creó una cuenta en Instagram y recibe muchos mensajes donde le transmiten que gracias a ella se animaron a comenzar en el mundo del deporte.
“Piensan que es tarde, lo que me pasó a mí muestra que no”, dijo en una entrevista que mantuvo con el diario El País.
Su rutina es intensa y disciplinada, de 6 a 7 de la mañana nada en el Campus todos los días, luego corre y hace bicicleta. Está estudiando educación física en el ISEF (es licenciada en Relaciones Internacionales) y, por supuesto, es mamá las 24 horas del día.
La pueden encontrar como @sil_sportsmood en Instagram.
Fuente: FM Gente